La videncia se define como una visión intuitiva, una capacidad de tener visiones claramente proféticas que suceden en la mente o fuera de ella.
Los videntes tienen el don de la videncia, y mediante colores, imágenes, visiones, sueños y símbolos son capaces de utilizar su don para dar sentido a su entorno, de algún modo.
La clarividencia sólo es posible cuando te la hace una verdadera vidente de nacimiento que no necesita de cartas del tarot ni ningún método de adivinación del futuro.
Generalmente, existen varias las formas disponibles de acceder a esta sabiduría intuitiva. La videncia es solamente una forma de canalizar la energía:
- Conoce tu alma.
- Conoce el alma colectiva del universo, incluidas las del pasado y las que todavía están por manifestarse.
- La sabiduría del espíritu.
La videncia es más habitual de lo que mucha gente piensa. Muchos individuos tienden a desacreditar las habilidades de los videntes, tratándolas de sueños, delirios, ilusiones o fantasías.
Aunque no lo parezca, esto es totalmente lógico, ya que casi todas las capacidades intuitivas tienen su origen en el mismo hemisferio del cerebro donde se albergan los centros creativos: el hemisferio derecho.
El hemisferio intuitivo del cerebro es donde se alberga la imaginación, y de la imaginación surgen las imágenes videntes, en forma de luces o formas.
De tal modo, puede ser complicado comprender si lo que se visualiza es imaginación o una auténtica profecía.
¿Cómo diferenciar la imaginación de la videncia?
Normalmente concebimos la videncia como una forma de visión interna mucho más lúcida que la imaginación. Generalmente, la videncia muestra qué visiones son reales.
Es raro que el vidente tenga su primera premonición en forma de un elaborado sueño precognitivo, aunque puede ser así.
La videncia suele ser muy sutil. Tanto que en ocasiones puede pasar desapercibida.
Un vidente puede empezar viendo colores, sintiendo molestias en la cabeza o incluso sintiendo que su visión se desvanece.
Pero, ¿cómo discernir si realmente se trata de una profecía?
Estas son algunas señales que pueden ayudarte a comprender si se trata de videncia genuina:
7 indicios de que tus capacidades videntes se están desarrollando
Si alguno de los siguientes indicios resuena y sientes que se identifica contigo, puedes aprender cómo desarrollar tus habilidades clarividentes para administrarlas tal y como desees.
- Los sueños ahora son más activos y vívidos.
- Sueñas más a menudo.
- Eres capaz de percibir presencias y puedes visualizar cuál es su aspecto.
- Has tenido visiones precognitivas en sueños o meditaciones.
- Empiezas a ver destellos de luz o visión borrosa.
- Puedes idear metáforas descriptivas para explicar sucesos.
- Puedes crear escenas completas sobre el futuro en tu mente.
¿Qué puedes hacer si experimentas 5 o más de estos indicios?
Los signos anteriores pueden ayudarte a revelar tu visión interna aguda se puede trabajar para que vaya a mejor.
Las visiones videntes se pueden utilizar de muchas maneras, como para planificar el itinerario de tu vida, para determinar en quién confiar y en quién es mejor no hacerlo. Incluso pueden servir para comprender fácilmente una circunstancia aparentemente complicada.
Y, una vez que sientes la seguridad de que se tratan visiones clarividentes, tienes la posibilidad de tenerlas en cuenta.
